En esta sección podréis encontrar toda la información sobre los diferentes tipos de anti-radares disponibles en el mercado para evitar los radares de trafico, como los detectores de radar, inhibidores de láser, y avisadores vía GPS. Sus diferentes modelos, comparativas y pruebas, como funcionan, y cual es más conveniente a cada uno según las necesidades.
La característica principal del Solo2 es que funciona a pilas AA con lo que tiene la ventaja de no necesitar enchufarse al mechero ni llevar cables. La desventaja es que hay que cambiarle las pilas, y debido a esta fuente de alimentación, la unidad no suele ser tan sensible como las versiones de enchufar y se pierden distancias de detección. La razón es que los detectores portátiles para ahorrar energía y poder emplear pilas como fuente de alimentación, solo estan activos el 15% del tiempo, el resto estan «durmiendo» para ahorra energía y por lo tanto no dan una alerta tan temprana como los detectores normales. (más…)
los Cobra se engloban en el mercado USA como detectores de gama baja, ofreciendo un precio mucho más económico que otros fabricantes como Escort, Valentine o Beltronics pero su eficacia como demuestra las distintas comparativas no es de las mejores tampoco. Son detectores exclusivamente diseñados para el mercado norteamericano y no son configurables para los radares y frecuencias europeas con lo que aquí su eficacia es muy escasa. (más…)
Los Snooper son detectores ingleses fabricados en mente para el mercado europeo. De manera que captan las frecuencias de los radares europeos. Pero lo malo es que son más bien de gama mas baja y no suele ser tan efectivo como los Beltronics europeos por ejemplo. Sson fabricados por una empresa koreana (BG Tech) de baja calidad y tecnología. Si bien ofrecen un precio mas económico, en esto de los detectores no hay términos medios, si intentas ahorrar en el detector, lo acabarás pagando a la larga. Merece la pena hacer el esfuerzo en comprarse el mejor que se ajuste a nuestras necesidades, para después darse cuenta, arrepentirse y acabar gastando mas, teniendo que comprar el bueno.